Guardo un recuerdo lejano
en un estante del alma:
Había un faro, un viento helado
que nos cortaba la cara,
y una canción de Serrat
grabada en una vieja cinta
sonaba camino de casa.
Aún te veo paseando
con tu mochila en el hombro
buscándome con la mirada.
Luego recuerdo la música
que huía por la ventana
persiguiendo un coche azul
que rodeaba la plaza
y se llevaba tu roce
y me dejaba un perfume
prendido de una palabra.
Ha pasado media vida
y aún te veo paseando
buscándome con la mirada.
Gracias
1 Comentario:
Hay amores que nunca se olvidan... Precioso.
Publicar un comentario