Tras la ventana cruje la noche
con danzas de ropa tendida
al aire ruin
de la ciudad con tráfico.
No hay más poesía
que la respiración o el llanto
o el susurro de la madre
que conjura el halo oscuro
y el rechinar de las puertas.
Evoco las rutas
inventadas con los dedos
cuando sigo a la lluvia
en transparente procesión
por los cristales.
...y por debajo de las puertas,
entra la noche
(Caballero Bonald)
1 Comentario:
Los vidrios que siempre reflejan la trasparencia de la nada.
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