Descansa, ven... no digas nada,
no permitas que el latido de las calles
nos distraiga de este alarde dulce
de eternidad que nos acuna.
Aquí, tan lejos del absurdo,
tan valientes ante las justificaciones,
suspendidos en la nada inevitable
de sabernos lentamente.
No cedas a la impaciencia,
somos ley frente al vértigo y la duda.
"Nunca es tarde para escribir un poema" (T.L.)
.
.
.
.
miércoles, 23 de junio de 2010
Nocturno IV
De azules...
Vistes de azul la mañana,
y ofrecen tus manos abiertas
aleteos de palomas
de ese azul que suaviza los bordes
de los arrecifes,
del azul que seduce a las nubes
con un solo aliento.
Vistes de azul el tiempo
y brota entre tus manantiales
la flor que sabe a regreso
de ese azul infinito que ampara
la palabra exacta,
del azul que pintó una mirada
de plata en la piel.
domingo, 20 de junio de 2010
Nocturno III
Busco bajo el mar tu parpadeo,
la mirada líquida de hombre sin aristas,
profundamente oculta entre el sonido
en blanco y negro, tu voz rota.
Me asusta esa ciudad
que es feroz sin tu presencia
vigilante.
Con calles como garras afiladas,
un paisaje que me engulle entre la gente,
sólo a mí. ..... ... ...... .... Sólo yo
rodeada de seres sin rostro ni nombre,
anónimos habitantes del fracaso
anulados por la misma decadencia
aislada, fría, del silencio.