Madrugada ya.
No sé si las dos o las tres, ni me importa,
sólo sé que empieza abril en las calles y en el alma.
Miente el viento, suena a invierno feroz
y grita entre los balcones y la ropa tendida
y le duele a los árboles de la plaza.
Aquí dentro tódo es plácido y tibio,
la noche de los lunes no es totalmente lunes
cuando construyo trincheras en tu pecho.
Cae la hora bruja y recuerdo tu promesa
de traerme el desayuno a la cama
en tus manos totalmente vacías.
(Esperando un nuevo ciclo,
como la luna)
11 Comentarios:
Es duro abril en el alma verdad? sobretodo cuando deja de ser Abril para convertirse, en un recuerdo, o para convertirse en otro abril...
No hay manos vacías, todas llevan aunque sea en ellas otras manos...
De eso se trata Mónica,de eso se trata.
Gracias por estar cerca.
Un abrazo.
k.
En una ocasión llevé el desayuno a una dama que yacía recostada y tibia y enseñando un muslo turbador por entre las sábanas y yo, pues, me ennerviosé, se me cayó la bandeja, lo puse todo perdido, de zumo, de colacao, de mermelada, la dama sobresaltada, el muslo vuelto a su cobijo, el gato escapó despavorido, sonó el despertador en ese momento... y claro, es que no se me courrió llevarle el desayuno a la cama en mis manos totalmente vacías... Desde entonces, es lo que hago, con un éxito indecible.
Un beso, Kitita.
Tú sí que me entiendes, jajaja
Besoooo!
k.
Tú sí que me entiendes, jajaja
Besoooo!
k.
Un placer leerte, sí. Gracias
BabiaS
He estado en el blog de otro compañero, además de aquel donde te descubrí: el de José Antonio Labordeta. Tienes un estilo que me gusta. Primero, los títulos: breves, como "justificación" o éste, tan usual, si lo pudieramos llamar, por cuánto la hora bruja denota ¿medianoche? ¿madrugada? ¿vigilía? Ausencia, naturaleza, urbanidad y una céntrica plaza.
Aitor, nos conocemos de sobras, soy Kit, conoces mi otra página: La Luz Azul, pero vaya, me encanta que hayas aterrizado también por aquí.
Un abrazo y bienvenido
k.
Bueno, Kit, vaya poema. ¿Es éste el del cambio de hora, verdad? Me ha encantado. Y lo cierto es que llevaba unos días sin pasarme por vuestros blogs, porque, digamos no han sido muy buenos para la lírica de los sentimientos de carne y hueso; y no tenía ni ganas de escribir ni de leer (los tres últimos días he colgado poemas que ya tenía escritos hace meses).
Coincido con Aitor en lo que dice. Y me alegro, claro, de verle por aquí también.
Besos mañaneros.
David
Me gusta, ya lo sabes...
Por cierto, kit, el enlace a mi blog no está bien, míralo anda
Publicar un comentario